Los accionistas de BBVA decidieron aumentar significativamente el capital destinado a la adquisición de Banco Sabadell, aprobando una ampliación del 96%. Este paso decisivo en el proceso de compra, que contó con un quórum del 70,75% del capital social, supone un importante paso adelante, aunque el camino por recorrer aún es largo. Los accionistas de Sabadell deberán decidir si aceptan vender sus acciones al finalizar el plazo de aceptación.
La ampliación de capital era un requisito clave para dar cabida a la adquisición de la entidad catalana. Sin embargo, existen incertidumbres que podrían afectar al proceso, como la sentencia de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y las decisiones del Gobierno sobre la fusión.
Carlos Torres, presidente de BBVA, envió un mensaje claro a los accionistas y al consejo de administración de Banco Sabadell, que aceptaron amistosamente la propuesta de fusión. Durante su intervención en la reunión extraordinaria, Torres destacó la importancia de la ampliación de capital y destacó la estrategia detrás de la propuesta y su impacto positivo en todos los grupos de interés. Dijo que BBVA quería dar a los accionistas de Sabadell la oportunidad de tomar una decisión.
Torres también explicó que la oferta era muy atractiva, ofreciendo una participación del 30% a precios de cierre y una oportunidad para que los accionistas de Sabadell adquirieran mayor valor al poseer una participación del 16% en la entidad combinada, suponiendo una aceptación total.
Durante el encuentro, que comenzó con una gran ovación para Torres y el director general Onur Genc, se presentaron los beneficios de la operación. La fusión permitirá a BBVA incrementar su crecimiento y reforzar su posición en España, convirtiéndose en el segundo banco en términos de crédito y mejorando su capacidad competitiva. Además, se espera que la transacción genere importantes sinergias, con un ahorro de costes estimado en 850 millones de euros antes de impuestos.
Torres indicó que estos ahorros se materializarían en un plazo de tres años, con unos costes de integración de 1.450 millones de euros. Estas sinergias están relacionadas principalmente con los costes fijos y la tecnología del grupo. Sin embargo, Banco Sabadell puso en duda algunas de estas cifras y pidió a BBVA que incluyera todos los escenarios posibles en el folleto de la OPA para que los accionistas pudieran tomar decisiones bien informadas.
Tras la aprobación del aumento de capital, Torres agradeció a los accionistas por su apoyo, destacando que el 96% del «sí» representó un paso importante para el avance de este proyecto. Manifestó que tienen plena confianza en el éxito de la operación.
En cuanto al impacto en el empleo, Torres aseguró que la integración de los recursos humanos se basará en criterios de competencia y mérito profesional. Reconoció la incertidumbre que genera este proceso, pero aseguró que todas las decisiones se tomarán para proteger la calidad del trabajo y las condiciones laborales.
Finalmente, Torres destacó el crecimiento y mejora que ha experimentado BBVA en los últimos años, así como los dividendos repartidos a los accionistas, que suman más de 13.200 millones de euros desde 2021.
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